NO TEMAS LO QUE OTROS TEMEN

La vida es demasiado complicada como para vivir estresados por las noticias que a diario circulan a nuestro alrededor. La mejor manera de vivir esta vida es vivirla en Él, perdiéndonos en Él, sabiendo que Dios es el dueño de esta tierra y de nuestra vida. “En el mundo tendréis aflicción; pero confiad, yo he vencido al mundo”, dijo nuestro Señor Jesús, fue su grandiosa promesa para nuestras vidas, y me cobijo bajo esa promesa cuando escucho, leo y veo todo lo que sucede en el mundo y lo que de ese mundo me afecta. Nuestra naturaleza está caída y podemos esperar lo que sea de ella, somos conscientes de esto, pero su amor y su cuidado no cambian, en medio de toda esta maldad de los corazones y de todas las maquinaciones de Satanás, Dios está con nosotros; así que prefiero centrarme en Él y no en las noticias que a diario nos traen los medios de comunicación y las redes sociales, que no hacen más que sembrar miedo y desesperanza.  En nuestro Señor Jesús hay esperanza, ese nuevo día está amaneciendo sobre nosotros, ese día en donde toda lágrima será enjugada, todo dolor se irá, toda oscuridad ya no será más, no habrá más llanto, ni preocupaciones, todas estas cosas pasarán. Dios siempre utiliza para bien lo que han pensado hacernos para mal, José es una muestra de ello, esa es nuestra esperanza y nuestra confianza.  Dios es fiel y su promesa no cambia, Él es el mismo ayer, hoy y por la eternidad. Descansemos en Él, confiemos en Él, creámosle a Él, pongamos nuestra mirada en Él y vivamos en la alegría de su presencia en nuestras vidas.